Algunos me dirán que Mini yo es un botijo, qué quieres que le haga si le quiero como a un hijo. Pero Scooot… estoy enamorada de este modernito en miniatura!
Ojo cuidao, el mundo de Zoolander está más cerca de lo que parece. Los looks de homeless en las pasarelas ya son habituales. Ay, señor, llévame pronto.