No sé en qué estarían pensando cuando dibujaron estas instrucciones para atrapar a una sirena… pero parece ser que basta con sacar una buena botella de cava (o de champagne) y sacarla del agua.
«Sé tú mismo siempre, a menos que puedas ser una sirena. Entonces, sé una sirena». Anda, que no aguantas tú en el agua sin potorri y con tu amado en tierra ni un segundo, tonti.
Pues eso beware of Ariel Hipster, con sus belleza y sus cantos de sirena inspirados en Sigur Ros, os llevarán al lado oscuro de lo independiente… ¡Ataros a cuantos mástiles podáis!