Ponte el chubasquero y las botas de agua que te compraste de segunda mano en el Hells Kitchen Flea Market, que como te pille el Sandy te vas a enterar.
Nuestro joven hipster por excelencia está triste porque escuchó una canción de su grupo indie sub pop folk en un anuncio de coches y cree que su vida ya no tiene sentido. Jode, ¿eh?