Sé que es duro darse cuenta y aceptarlo, pero sí, querida, tu abuela Dolores llevaba gafas de pasta con print leopardo antes que tú, incluso la pared de su casa tenía papel pintao detro. Desolée.
Sabes que has llegado al punto culmen de tu look hipster cuando te colocas unos pantalones pitillos fucsia de print leopardo (siendo chico) y sales a la calle como si nada.
Aunque mola más recolocarse las gafas de pasta con el dedo corazón, haciendo así un fuck off como el que no quiere la cosa a todos los presentes. Nos gusta esta chica.