Corrían los finales de los 80, principios de los 90: aparece tu abuelo con esas pintas por el pasillo y es algo que te marca profundamente la psique. 20 años más tarde te conviertes en hipster.
Aquellos maravillosos años en los que eras un niño con sobrepeso y seguías comiendo Good Humor Ice Cream (El cartel y el logo no es igual que el de Frigo de los años 80?) como si no hubiese mañana.
Antes de irte de tiendas de segunda mano y a una peluquería de modernos porque has decidido que quieres un look retro casual, revisa bien esta imagen y asegúrate de que no te parezcas en nada a ella.
No estoy seguro de si esta foto es de tu padre en los años 80 o eres tú en una fiesta con tus amigos modernos y con un filtro Polaroid – Instagram… Aun así, ¡veo mucho estilo!