Te quiero como el culete quiere al papel de WC. Vale, pues cuando me quieras como el culete a las toallitas de culete perfumadas y que, si las tiras por el váter, atascan ciudades enteras, me llamas.
Eso que oye, te enamoras al primer mordisco de la pizza de peperoni y le pides relaciones serias con una visita a sus padres y le propones tener hijos el segundo día… echando a la basura todos tus ideales. El amor es lo que tiene.
«Eres la Nutella para mi cuchara». Ojo que pocas cosas más bonitas te pueden decir. Quizás «me gustas más que comer Nutella o Nocilla con los dedos» no estaría nada más. Yuuummy…
Es bonito ver cómo hay un roto para cada descosío, como por cada modernita de la bengalita hay un modernito de bicicletita que quiere ir al laguito a ver ranitas. Viva el amor.